Los cuentapropistas enrolados en el Sindicato de Vendedores Ambulantes de la República Argentina (Sivara) decidieron patear el tablero y tras haber firmado ayer un acuerdo con la Casa de Gobierno para desalojar el centro de San Miguel de Tucumán, decidieron esta mañana que no se irán. Aseguran que no estarían dadas las condiciones para que todos dejen las calles céntricas y que habría un trato diferencial con un sector.
"Hay un grupo que no quiere irse, que tendría vínculos con agentes de Tránsito de la municipalidad de San Miguel de Tucumán, quienes les habrían garantizado que una vez que la mayoría nos instalemos en la ex estación de El Provincial, en avenida Roca al 600, podrían seguir trabajando sin inconvenientes", sostuvo Claudio Robledo, refente del Sivara.
El dirigente expresó que esperarán que en las próximas horas se concrete un nuevo encuentro con el secretario general de la Gobernación, Oscar Bercovich. De acuerdo al acta firmada ayer, el próximo lunes los ambulantes ya no deberían estar en el centro. "Si no se destraba esta situación resistiremos al desalojo", advirtió Robledo.
Ayer, en la Casa de Gobierno, las partes acordaron que en el interior del cuadrante conformado por las calles San Lorenzo, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero y avenida Avellaneda no se permitirá la venta callejera. Desde el perímetro de está área, hacia afuera, sólo se autorizará la venta con mercadería en en mano o con bandejas.